Debido al aumento experimentado en el uso de la bicicleta y otros ciclos se ha considerado relevante contar con nuevas señalizaciones que permitan entregar mayor seguridad a algunos usuarios vulnerables y facilitar el desplazamiento de los diversos modos de transportes en las calles. Dentro del nuevo Manual de Señalización de Tránsito se destaca la demarcación de zonas de espera de ciclos  y otras señales que entregan preferencia a estos en el momento en que un vehículo vira.  Se han incorporado también señales de restricción de «Zona 30», es decir, un lugar donde se restringe la velocidad de zona urbana, la que puede variar entre «Zona 20» y «Zona 40». Esta nueva señalización sirve también para especificar cuando hay una ciclocalle, la que contempla una vía donde circulan los ciclos junto a otros vehículos motorizados.  Una vez que se apruebe el Centro Automatizado de Tratamiento de Infracciones (CATI), se podrán incorporar señalizaciones que informen a los conductores sobre la presencia de una cámara para estos fines.  La incorporación de esta nueva señalización permite que la relación entre conductores, ciclistas y peatones sea más igualitaria pues cada actor tiene un rol claro en cada espacio vial.